EL AUTISMO DE LAS REDES SOCIALES

Autor FABIO ARÉVALO ROSERO MD

El universo de las redes sociales además de virtual es irreal, al menos para la gran mayoría de usuarios. El creador de “Wikipedia” Jimmy Wales, advierte que no hay que creerle todo a la más famosa enciclopedia del internet. M ás del 80 por ciento de la energía, dedicación y tiempo ocupado en las redes sociales virtuales es asunto perdido.
El índice de eficacia es extremadamente bajo. Se requieren estrategias muy especializadas e innovadoras para causar gran efecto, si tenemos en cuenta que millones de personas no alcanzan un mínimo resultado en sus expectativas, salvo excepciones.Recientemente, el presidente de Google, Eric Schmidt, se refirió a Twitter como el "correo electrónico del pobre”, una aseveración un tanto sobradora. Pero el fundador del servicio del microblogging, Jack Dorsey, dice que Twitter no es una red social, sino una herramienta de comunicación, una plataforma de mensajería.
Pero hoy su poder de conexión está muy cuestionado y ha sido sobredimensionado. La mayoría, según se ha demostrado son mensajes sin receptor, perdidos. Es hasta simpático o decepcionante ver miles de “tweets”, lanzados por unos usuarios tontamente convencidos que tienen destinatarioEsto lo acaba de confirmar una investigación sobre las redes sociales que demostró que solo un mínimo número de usuarios tienen la capacidad de influir de manera significativa en Twitter.
Según un estudio de “Sysomos”, una compañía canadiense que analiza las redes sociales, solo el seis por ciento de las actualizaciones de estado de Twitter fueron re-transmitidas y solo el 23 por ciento generó al menos una respuesta. Mientras que tan solo el 1.53 por ciento de las conversaciones en Twitter tuvo al menos tres niveles (un mensaje que genera una respuesta que a su vez genera una segunda respuesta). La empresa analizó más de mil millones de mensajes en los últimos dos meses y sacó unas conclusiones interesantes.
Al menos el 71 por ciento de los mensajes no tienen ningún tipo de respuesta, ni interés. Sorprende conocer que solo dos de cada diez mensajes en Twitter realmente consiguen generar algún impacto. Estudios como el de Sysomos confirman lo que han dicho los ‘expertos en social media’. Existe una nueva raza de jóvenes y no tan jóvenes que pontifican en las redes sociales, algunas veces con argumentos y otras sólo como parte de una moda. Pero son muy pocos los privilegiados que terminan siendo influyentes.
Los sociólogos las llaman “Redes Anti-Sociales”, porque al ocuparnos en ellas dejamos de ser sociables sacrificando parte del tiempo que nos permitiría estar en contacto personalmente con amigos y conocidos. En todo caso, lo que habría que atacar es la ineficacia de las redes virtuales, o bien la ineficacia de los usuarios para comprender cuáles son los límites de una herramienta virtual o su ineptitud para explotarlas.
Por ahora, con este mundo virtual, aislado y engañoso, nos estamos volviendo autistas. (Tomado de www.semana.com)